Como os expliqué, el sábado Melchor Mauri in person (de carne y hueso) nos invitó a salir con sus dos equipos de la titan el domingo. El problema es que no teníamos preparadas las bicicletas de carretera, y decidimos (el Dr. decidió por nosotros) salir con las de BTT por carretera con las leyendas vivas del ciclismo actual. Para ellos seguro que fue un paseillo... pero para nosotros una aventura más que explicar.
Salimos un grupo numeroso, entre ironman, triatletas y ciclistas. Quizás 15. Cuando nos vieron llegar con las btt y ruedas de 2.4 pusieron cara extraña (nosotros hubiésemos hecho lo mismo). Inicialmente queríamos hacer 25 kms con ellos para luego seguir nuestro camino, pero algo cambió en el transcurso de la ruta.
.. La hicimos todos juntos. Salimos desde Calella y enseguida empezaron a marchar alegremente. En la grupeta se oían gritos de entusiasmo y como diría Perri, ya la hemos liado. Seguimos a rueda todo el recorrido, sin dar nunca la cara, pero cada vez más cómodos. Manteníamos (arropados por el grupo) 45-47 kms/h, a un ritmo de pulsaciones más alto que el resto, pero que se podía aguantar. Salió un entreno espectacular:5 horas, 174 de máxima (98%) y 122 avg (casi un 70% de media) 135 kms, a 33 kms/h de media... luego bajamos el promedio del kilómetro 120 al 135, que hicimos por la playa; 600 mts ascención, 3178 calorías.
Mis sensaciones fueron magníficas. Ese punto de motivación de correr con los grandes, me dió un 10% más de rendimiento. El momento estelar lo protagonizó el Dr cuando estábamos en Canet, llegando a Sant Pol de regreso, después de 120 kms.... "Negrito, voy a atacar" Dr. Llevas r
uedas de 2.4, plato de 40 y bici de montaña... Y el Dr. atacó... Perri: Hosti tú, se va el Dr... Atacamos los tres. Cada uno por un lado, uno tras otro, llegando exhaustos a la cima... Luego en el repecho de Calella se repitió la misma historia.... se lió un contubernio tremendo, pero ataques muy sanos y de muy buen rollo. Cuando llegamos a Calella Melchor nos dedicó unas palabras de elogio que nos llegaron. Nos motivaron para seguir entrenando. Por cierto, Abraham Olano, gran persona. No me lo imaginaba tan grande... Es un gigante del ciclismo en todo sentido. Jordi Artemany, fenomenal... Desde aquí le envio un afectuoso saludo a todos, y agradecidos la salida.
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